Todo cambia… menos él

«El que no cambia, no evoluciona».

Dijo una vez, Rem Koolhaas, arquitecto y escritor neerlandés.

Sabemos que el cambio es una variable constante e inevitable, presente en todos los aspectos de nuestras vidas y, sí, es algo necesario.

¿Recuerdas cómo eran las cosas hace solo 2 años atrás?, pero nadie se imaginó a principio del año 2020 que las cosas cambiarían de una manera drástica, nadie imagino que el mundo se detendría de esta forma.

Pero te recuerdo que cada cosa tiene su lado positivo, aunque no lo creas, solo es cuestión de ver más allá. También quiero animarte y recordarte, que en medio de todo esto, hay algo o, mas bien, alguien que permanece igual.

«Jesucristo nunca cambia: él es el mismo ayer, hoy y siempre». (TLA)

Hebreos 13:18

y ha prometido:

  • Estar contigo (Isaías 41:10)
  • Guardarte y protegerte (Jeremías 15:20)
  • Salvarte (Jeremías 30:11)

Así que ten fe, anímate y esfuérzate, «levántate y manos a la obra; que el Señor está contigo. (1 Crónicas 22:16)

Ah, y no olvides que Dios está en control.

Dios te bendiga.

Publicado por:

3 respuestas

Deja un comentario

Más contenido de este autor:

Reflexión

Háblame, Dios mío

¿Qué quieres que haga? Hoy me sentí como hacía mucho que no me sentía: sin rumbo. Agradezco que tu amor, tu gracia y tu misericordia

Biblia

Mayordomía bíblica y finanzas personales

”La mejor manera de comenzar a pensar como mayordomos es reconocer que usted no es el dueño de nada. Dios es el dueño de todo y le ha confiado recursos, tiempo, talento y personas para que usted administre. Como su gerente, su papel es ser fiel a sus propósitos. Independientemente de si tiene mucho o poco, debe tratar de permitir que Dios tenga control sobre sus decisiones financieras.”